














Los arquitectos del estudio Bourgeois / Lechasseur pensaron en la estrella Altaïr, la más brillante de la constelación de Aguila, cuando eligieron el nombre de esta casa. Significa “pájaro” y hace referencia a la forma de “V” que tiene la casa vista desde arriba y a las fachadas alargadas que están como suspendidas sobre la naturaleza. El sitio es Cap-à-l’Aigle, un pueblo situado en lo alto de un acantilado que domina el río San Lorenzo. Se trata de una zona montañosa de la región de Charlevoix (Canadá).
La vivienda es discreta desde la calle y muy cerrada hacia el norte, la orientación más desfavorable respecto al clima. En cambio, se desarrolla en dirección al río despegándose del suelo. La originalidad de la forma de la casa, los dos prismas longitudinales que se colocan uno encima del otro abriéndose como un abanico, fue buscada por los arquitectos para ofrecer mejores vistas del paisaje. “Las fachadas vidriadas proporcionan diferentes perspectivas y encuadres del río, el bosque y la ciudad de La Malbaie debajo”, explican.
De cerca, la vivienda guarda algo de misterio camuflándose en los árboles. Como una cáscara cerrada, el segundo piso se extiende sobre la entrada para darle protección. Mientras que el estar se enfrenta a una gran ventana orientada al Sur para ganar sol e iluminación natural, y con vistas a la piscina que parece extenderse hacia el río.
La planta baja está dividida en dos alas. Por un lado, se alinean las tres habitaciones de los niños y del otro, una pequeña sala de estar con salida a una terraza y la pileta. Una escalera de hierro con peldaños de madera conduce a la planta alta.
El primer piso está parcialmente en voladizo y sobresale hacia el río. De un lado de la escalera, se ubica la suite con su baño y vestidor. Luego, el espacio está completamente abierto y ofrece vistas panorámicas. Del otro lado, se extiende una gran terraza construida sobre el techo de las habitaciones de los niños.
En cuanto a la materialidad, la vivienda está completamente revestida con listones de madera color gris. En los sectores de la fachada que están retraídos el revestimiento cambia por madera de cedro con su tono natural, creando un contraste sutil. Esos sectores quedan protegidos por aleros. Esa misma madera cálida se extiende en el cielo raso interior para reforzar el efecto de continuación hacia afuera.
FICHA TÉCNICA
Casa Altaïr
Ubicación: Cap-à-l’Aigle, Québec (Canadá)
Proyecto: Arquitectos Bourgeois / Lechasseur
Constructor: Construction des Grands-Jardins
Año: 2016
Photos: Adrien Williams vía V2com
EL ESTUDIO
En 2010 decidieron unir esfuerzos con el propósito de crear la Agencia de Arquitectos Bourgeois / Lechasseur. Sus proyectos se orientan hacia una arquitectura contemporánea, realista y sensible con el paisaje. “Para nosotros es importante no revelar todo la primera vez, el efecto sorpresa es esencial en el descubrimiento de un proyecto”, sostienen los socios. De ese modo, se enfocan en lograr una secuencia de exploración y descubrimiento a través del diseño de sus obras. Entre sus premisas y objetivos se destaca también su preocupación por conseguir el ingreso de la luz natural y la protección frente a los vientos dominantes. “No tenemos una arquitectura preconcebida porque la idea para cada proyecto debe ser realmente una respuesta al sitio y a lo que el cliente desea. Somos diseñadores sueños”, definen.