Triana Ágela Maida es santafesina, pero a los 17 años se fue de su ciudad para iniciar una carrera de modelo que la llevó por el mundo. En Miami se enamoró de un estilo de vida que hoy difunde desde sus redes sociales, donde la siguen miles de personas: en Instagram @Serfitnessoficial tiene más de 100 mil seguidores. Además de trabajar como modelo es personal trainer, técnica gastronómica y asesora de imagen.
#1 “Si hago muchas pesas me voy a poner enorme”
Lo primero que hay que decir es que las mujeres no tenemos predisposición a ponernos supermusculosas; si bien siempre va a hacer nuestra genética la que principalmente disponga si ganamos o no masa muscular con facilidad, para quedar “enormes” se necesita mucha suplementación y una alimentación muy específica. Las pesas ayudan a generar y a tonificar músculo. ¡Animate!
#2 “Voy a hacer mucho cardiovascular para sudar y así bajar de peso”
Si bien el cardiovascular es un gran aliado para la pérdida de peso y grasa, no tiene que ser el único ejercicio. La gente asocia el transpirar con la pérdida de peso y si bien es así, lo que se pierde es mayormente agua, ya que transpirar es una reacción del cuerpo a la temperatura. Lo que más ayuda es hacer ejercicios de intervalos; estos se van a incrementar y mantener la masa muscular regulando tu metabolismo y favoreciendo la pérdida de peso.
#3 “Como de todo, total después lo quemo en el gym”
Esto es algo que depende pura y exclusivamente de la genética y el objetivo en concreto. Hay metabolismos a los que parece no importarles lo que ingieren ¡pero otros sí! Ninguna rutina de ejercicios es un remedio para una mala alimentación. Para ver cambios tanto externos como internos, la alimentación saludable tiene que ser del 70% por sobre el ejercicio que es un 30%. También dependerá del objetivo que hayas establecido con tu nutricionista en cuanto a la cantidad de calorías y macros que debés consumir en un día.
#4 “Primero hago cardio y después entreno”
Yo también tenía esa costumbre, pero la realidad es que el cardio intenso es mejor hacerlo solo o después de las pesas. Si lo hacemos antes consumimos la energía (glucógeno) que reservan nuestros músculos y a la hora del entrenamiento no vamos a llegar a nuestro máximo potencial provocando incluso una fatiga muscular.
#5 “La avena engorda”
En primer lugar: ningún alimento engorda si se consume en una porción justa. Lo que sí varía es el aporte de beneficios para el organismo. La avena es uno de los carbohidratos complejos más beneficiosos: aporta fibra, proteínas y grasas saludables, regula el apetito y la ansiedad. Es riquísima y súper versátil. La porción depende de cada persona y objetivo. Preferí la versión menos refinada, cocida con agua o leches descremadas o vegetales y endulzada con productos naturales como stevia.
#6 “El whey protein sustituye una comida”
¡Grave error! El polvo de proteína es una complementación, una suplementación que justamente “complementa” los entrenamientos y la alimentación. Por sí sola no reemplaza comidas porque no aporta los beneficios ni las calorías de una comida completa. Una de las maneras de utilizarla para una merienda, por ejemplo, es combinarla con leche, frutas o pasta de maní en algún batido.
#7 “Para bajar de peso y grasa debo eliminar los carbohidratos”
Los carbohidratos son una fuente esencial de energía básica para el organismo ya que es el combustible de nuestras neuronas y músculos, por lo que jamás hay que sacarlos de la alimentación diaria. Solo hay que preferirlos de buena calidad y complejos, y regularlos según cada objetivo con un profesional.
#8 “Puedo comer todo lo que quiera total es light”
“Light” no siempre es sinónimo de saludable o de que no engorda. Sólo quiere decir que ese alimento fue reducido un 25% en grasa, sodio, azúcar, calorías, etc. La realidad es que a varios de estos productos les agregan más conservantes y químicos que a las versiones normales. Lo que engorda no es el alimento en sí sino la porción.
#9 “Entreno más de tres/cuatro horas al día para lograr más rápido mis objetivos”
El cuerpo, si no está preparado, no resiste tantas horas de entrenamiento; el sobre entrenamiento puede generar lesiones y fatiga muscular. 40/60 minutos al día son suficientes para ayudarte a lograr tus objetivos. Si sentís que el entrenamiento no es efectivo, hablá con tu entrenador para que modifique tu rutina.
#10 “Entrenar a la mañana es más efectivo”
Para algunos sí ¡y para otros no! ¡La realidad es que es lo mismo! El horario que vos elijas para entrenar va a ser en el que vos te sientas más cómoda. Se dice que es mejor en las primeras horas del día porque es cuando tenemos más energía, después de dormir. Pero en cuanto a la efectividad es lo mismo.