Primero fueron los pijamas. Ahora salen a la calle los desabillés, una evolución natural del kimono que ya lleva varias temporadas en el podio. Pero el que se usa ahora, más bien remite a la época dorada de Hollywood.
La tendencia del vestido de seda cruzado tipo batón o ‘robe dress’ comenzó a verse por las calles de Nueva York a finales del invierno, sobre una polera y botas altas. Ahora se adaptan a esta nueva temporada y a todos los looks. Pueden ser largos hasta la pantorrilla como vestidos, o como túnicas sueltas para combinarlos sobre pantalones y algún top.
Llegan en distintos estampados y texturas. Para los días más frescos lo hay de terciopelo liviano en colores oscuros –una alusión al Hollywood de los años ’40- o los convencionales más livianos de seda. De un solo color o estampado.
Si va sobre un jean y una remera eleva el look. Si el vestido/túnica tiene demasiados colores o muy fuertes lo mejor es combinarlo sobre un pantalón y top negro u otro color neutro para que cobre protagonismo el kimono/túnica de seda.
Con solo anudarlo a la cintura lo convertís en vestido y lo podés combinar con cualquier tipo de calzado ya que se adapta a cualquier look.