Muchas de las celebraciones que han tenido un origen religioso, como es el caso de la Navidad y los Reyes Magos, han terminados siendo adoptadas por la mayoría y es una ocasión hermosa para hacerles regalos a nuestros seres queridos. Y si bien algunos grandes se hacen regalos el 6 de enero, lo cierto es que la llegada de los Reyes Magos es casi exclusivamente una excusa para regalarles a los más pequeños (y no tanto) de la casa. Porque las tradiciones se pasan de generación en generación y en cada casa se respetan las costumbres: algunos solo se acuerdan de los zapatitos, otros también dejan agua y pasto… Pero a todos los mueve el mismo sentimiento: la ilusión.