“Rosario siempre estuvo cerca” dice la canción de Fito Páez sobre Alberto Olmedo, ambos hijos dilectos de la ciudad donde Manuel Belgrano creó y juró la bandera. Contrariamente a lo que muchos creen, no es la capital santafesina, pero sí la más conocida de sus ciudades.
Una de sus principales arterias es la peatonal Córdoba, ideal para tomar o comer algo y hacer compras. Al final de la peatonal hay premio: frente al Monumento a la Bandera, está la Estación Fluvial, el lugar donde comenzar un viaje por el río, la principal atracción natural. Y si querés alojarte, la hotelería es excelente.
CLÁSICOS E IMPERDIBLES
Algunos de los lugares más importantes de la Argentina están en Rosario y son ellos el imán principal para llegar a esta ciudad en la que nacieron tantos connacionales famosos como Fontanarrosa, Fito Paez, León Gieco y muchos más.
* Monumento Nacional a la Bandera. Inaugurado el 20 de junio de 1957, es obra de los arquitectos Ángel Guido y Alejandro Bustillo, junto a los escultores José Fioravanti, Alfredo Bigatti y Eduardo Barnes. Es único en el mundo en su tipo, es decir, dedicado a una enseña patria. Está formado por tres partes: la torre con la cripta del general Manuel Belgrano, el Patio Cívico y el Propileo, debajo del cual está la sala de Honor de las banderas de América. Está ubicado en el Parque Nacional a la Bandera, sobre las barrancas del río Paraná, en el lugar donde se ubicaron las Baterías Libertad e Independencia, en 1812 y honra la creación de la bandera nacional que Belgrano hizo flamear por primera vez el 27 de febrero de 1812.
* Pasaje Juramento. Es una de las obras más modernas y vincula la Plaza 25 de Mayo con el Monumento a la Bandera. Desde un puente peatonal se puede apreciar el conjunto escultórico de Lola Mora sobre un espejo de agua.
* Palacio del Correo. Se encuentra en el predio donde antiguamente funcionaba la jefatura de Policía. El actual edificio es de principios del siglo XX y se lo declaró Monumento Histórico Nacional en 1997.
* Basílica Catedral Santuario “Nuestra Señora del Rosario”. Data de finales del siglo XIX y se destaca por su cúpula. El altar mayor, de mármol de Carrara, se trajo de Italia. En la cripta ubicada debajo de este altar se encuentra la imagen de la Virgen del Rosario, traída en 1773 desde Cádiz, España.
* Parque de la Independencia. Es un parque público, ubicado en el centro geográfico de la ciudad, entre las avenidas Pellegrini y Ovidio Lagos y el Boulevard 27 de febrero. Su extensión es de 1, 26 km2. Incluye el Rosedal, la fuente de cerámica más grande del mundo (donada por España en 1936), el Jardín Francés, el Calendario (todas las tardes, desde 1946, los jardineros arreglan las flores para mostrar la fecha con plantas), varios museos, el hipódromo, el Museo de la Ciudad de Rosario, el Jardín de los niños y también alberga a tres clubes, entre ellos, Newell’s Old Boys.
* Parque España. Es un complejo cultural compartido entre la Municipalidad, el gobierno español y las colectividades españolas. Está emplazado sobre el río, de hecho el complejo fue construido siguiendo la línea de la barranca. Contiene al complejo cultural, el Colegio Español, un teatro, un anfiteatro y cinco túneles reciclados como salas de exposiciones.
* Parque de las Colectividades. Costea la barranca en la parte semicéntrica de la ciudad, con una gran vista al Paraná y las islas. A lo lejos puede divisarse la silueta del puente Rosario–Victoria. Se alza sobre terrenos del antiguo puerto de Rosario.
* Parque Urquiza. Es el auténtico mirador natural del río. Más allá de esto, forma parte de la historia económica de Rosario: es el sitio donde se realizó el primer embarque de trigo con destino a Europa, lo que fue el arranque de un futuro venturoso. Se lo distingue fácilmente, por su planetario.
* Puente Rosario–Victoria. Es uno de los accesos a la ciudad, desde la vecina provincia de Entre Ríos. Tiene 59 kilómetros de longitud.
* Río Paraná. Es una de las ciudades que mayor provecho saca del río, no solo para la industria y la economía, sino para disfrute de locales y visitantes. Imprescindile, un recorrido por las islas ya sea en barco o lancha. Y también, está la posibilidad de practicar kayakismo o alquilar bicicletas para visitar la ribera.
* Museo de Bellas Artes Juan B. Castagnino. Su extenso patrimonio posee una colección que recorre la historia del arte argentino. Se inauguró en 1937, en un edificio proyectado por el arquitecto Hilarión Hernández Larguía y heredó la colección del primer Museo de Bellas Artes de 1920. Cuenta con obras, entre otros, de Goya, Quinquela Martín, Fader, Petorutti, Spilimbergo y artistas más modernos, como McEntyre.
PASEO DE COMPRAS
Además de los paseos, están las ferias y mercados donde se puede ver el trabajo de los rosarinos y comprar todo tipo de artesanías y antigüedades. Uno de estos lugares es la Feria de artesanos La Fluvial, en Av. Belgrano y Pintor Domínguez. También está el Mercado de pulgas del Bajo en Av. Belgrano y Buenos Aires, la Cooltura Feria de Diseño, en Roca y el río, el Mercado La Huella, en Rivadavia y Santiago, y la Feria de Artesanos La Florida, en Eudoro Carrasco 2200.
DÓNDE COMER RICO Y BIEN
Hay diversos lugares, para todos los comensales y todos los gustos. Obviamente, como buen destino fluvial, es el lugar ideal para disfrutar de pescado fresco.
* Rock & Feller’s. Las mejores hamburguesas, lejos. Y mención aparte para la deco rockera. Boulevard N. Oroño 106.
* El viejo balcón. Para comer una rica parrillada. Italia y Wheelright.
* Escauriza. Gran parrilla, uno de los lugares más recomendados para comer pescados, por ejemplo, pacú a la parrilla. Obviamente, se especializan en pescados de río. Escauriza 3612.
* Sunderland Bar. Restó y bar para paladares gourmet. Av. Belgrano 2010.
* Los Jardines. Se define como restaurante y pub de río, se encuentra en la barranca del río Paraná, en pleno centro. En el interior, el restó; en el deck, sobre el río, el pub. Rica comida, buenos tragos y mejor vista. España y el río.
* Bar El Cairo. El legendario lugar donde se juntaba el querido Negro Roberto Fontanarrosa con sus amigos, en la llamada Mesa de los Galanes, está ubicado en una hermosa esquina rosarina. Y si no se pasó por El Cairo, no se puede decir que se estuvo en Rosario. Santa Fe 1102.
Texto: Florencia Romeo.