Con la llegada de la primera, llegan las ganas y la oportunidad de disfrutar de la vida al aire libre. Vivas en casa o departamento, siempre es posible armar un espacio florido y con color para renovar el aspecto del hogar y la energía.
Hay muchísimas plantas que pueden ponerse en esta época con la garantía de que van a florecer y crecer bien. Algunas que pueden ponerle mucho color al jardín son:
- Anémonas: son buenas para balcones y patios en los que reciban luz por la mañana. Requieren tierra siempre fresca y no toleran el frío, por lo que es mejor tenerlas en maceta que pueda moverse o cubrirlas si hace mucho frío.
- Campanillas: En la primavera es cuando más floración tienen, aunque también en otoño pueden florar. Requieren buena cantidad de luz, pero no de forma directa.
- Begonias: son ideales para los espacios en los que hay luz pero no sol directo, porque necesitan calor pero no extremo. Hay variedad de colores, aunque la más común es la roja.
- Petunias: Estas flores se dan en una gran variedad de colores y combinadas. La floración ocurre en época de primavera, pero también se puede dar en verano. No requieren grandes cuidados y toleran el sol.
- Gazanias: son las más tolerantes a las temperaturas. Pueden florecer todo el año, pero su esplendor es en primavera. Hay variedad de colores.
- Rosas: hay más de cien tipos y en general conviene ponerlas en tierra, con buena luz y ventilación. Son para jardín, ya que crecen en su mayoría como arbusto y necesitan espacio.
Primavera, buen momento para fertilizar
Como toda actividad, fertilizar tiene una justa medida y un momento indicado. Para que su función sea efectiva hay que hacerla en la medida correcta y en el momento correcto. Cuando a una planta, ya sea que esté en maceta o en tierra, le agregamos algún fertilizante ésta comienza a verse más saludable, da nuevas hojas, crece y comienza a producir brotes.
La mejor época para fertilizar un jardín o un cantero es cuando se va terminando el invierno y comienza la primavera. No es bueno colocar estos aditivos cuando se dan temperaturas extremas. Si hace mucho calor, generamos que la planta comience a dar brotes, flores y hojas que necesitarán mucha más agua y si no la obtienen se secarán, entonces trabajó y gastó energía en algo que no prosperó. En la cara contraria, en el invierno, con el frío las plantas entran en un estado de reposo y por eso no conviene ponerlas a producir en un ritmo que no es el natural. Las temperaturas extremas significan cuidado y mantenimiento. En las plantas que están en maceta rige esta misma regla, aunque éstas a veces dan señales de decaimiento (hojas amarillentas, por ejemplo), entonces es bueno prestar atención y fertilizarlas.
Primero tenemos que saber que hay una diferencia pequeña entre las plantas de interiores y las de exteriores. Las primeras suelen estar en maceta y eso hace que el sustrato se lave más rápido. Del mismo modo, en estos contenedores la tierra tiende a endurecerse más rápido, por eso hay que removerla periódicamente para que esté aireada.
En ambos escenarios lo mejor es utilizar fertilizantes orgánicos, como el humus de lombriz o el compost. Estos ayudan a que la tierra no se compacte y son asimilados mejor por la planta. Además, usando elementos naturales mejoramos también al suelo, que es la base de aquello que deseamos mejorar y cuidar. También hay fertilizantes químicos, son de liberación lenta. A su favor se cuenta que son prácticos, pero la contra es que si se usan en demasía provocan una acumulación de sales en el suelo que termina jugando en contra. Con los orgánicos este riesgo no existe. Para las plantas que necesitan suelos más ácidos (como las de interior o las azaleas y los helechos) también se puede aplicar resaca que es natural.
Con los fertilizantes orgánicos hay que tener en cuenta que son de efecto a largo plazo, aunque la primera mejoría se nota casi de inmediato. Esto hace que el usuario se entusiasme y lo siga usando sin tener en cuenta que sigue funcionando todavía la primera aplicación. Así es como se perjudica al suelo y por consiguiente a las plantas.
Fuente: María Martha Pizzi, Con Sabor a Hogar (www.consaborahogar.com.ar).