Llega la primavera y con ella los días soleados y más largos, ideales para animarse a paseos con los chicos al aire libre y disfrutando de la naturaleza. Dos propuestas para escaparse de la ciudad y pasarla bien acá nomás, con actividades divertidas para los más pequeños y también para los adultos.
Granja Loma Verde
A 80 km de la Ciudad de Buenos Aires, en la localidad de Brandsen, se encuentra la granja educativa Loma Verde. Creada en 1982 por una pareja de viajeros que quisieron honrar y mostrar el orgullo por su tierra, la Pampa húmeda, fue la primera granja educativa del país. Allí, en sus 8 hectáreas, los chicos pueden intervenir en distintas actividades vinculadas con la agricultura y la ganadería, así como la cría de animales domésticos y acercarse a la vida rural. Además, propone pasear en sulky o a caballo, fabricar ladrillos de barro, alimentar a los animales de la granja, amasar pan, ordeñar vacas, visitar la hilandería y la quesería, donde se aprenden los procesos de producción y elaboración de las lanas y los quesos -que se realiza con la leche recién ordeñada. Se puede pasar un día y disfrutar de un exquisito almuerzo tradicional y campestre o elegir una estadía de fin de semana alojándose en alguna de sus casas de huéspedes.
LO QUE HAY QUE SABER
Cuándo: Sábados, domingos y feriados.
Dónde: Ruta 215 Km 44,5, Brandsen.
Más información: granja@granjalomaverde.com.ar I www.granjalomaverde.com.ar
Pequeña Holanda
Ubicada en el partido de Escobar, esta granja recrea un típico pólder holandés construido en la década del 60 por una comisión de técnicos e ingenieros holandeses para la radicación de 100 familias holandesas dedicadas a la producción de hortalizas, frutales y lácteos. Si bien el proyecto no pudo concretarse, poco después una pareja de austríacos retomó aquel plan inicial y lo llevó a cabo en menor escala. Con un total de 43 hectáreas, 33 de ellas se mantienen en estado natural a modo de reserva ecológica, con la flora y fauna típicas y puede ser recorrida por una serie de senderos internos caminando, a caballo o en carro. Otras 10 hectáreas ocupa el Polder, un dique de tierra de dos a tres metros de altura a salvo de las crecidas del Río Paraná.
En Pequeña Holanda funciona una granja educativa que tiene por finalidad contactar a los niños con la naturaleza, para conocerla, quererla y respetarla. Allí, pueden interactuar con vacas, aves de corral, caballos y conejos, entre otras especies, alimentarlos, amasar y hornear pan –que luego degustan con una chocolatada- y mucho más. Todas las actividades se realizan bajo la guía y el cuidado de instructores, por lo que los adultos pueden aprovechar para disfrutar de otras actividades al aire libre.
El lugar es apto para toda clase de actividades recreativas, educativas y deportivas:
• Arboleda y mucho verde invitan a la contemplación y el relax. Paseos a pie, a caballo, en bicicleta, brindan un solaz más activo por todos los caminos y senderos de la Reserva.
• Las canchas de fútbol y voley permiten encarar el día en forma más deportiva.
• Actividad náutica y paseos en lancha o kayak permiten conocer y disfrutar esta zona del Delta.
• Clases de equitación criolla.
• Fogones, quincho y abundante sombra dan una marco ideal para encarar el mediodía con un clásico asado y charlas de sobremesa.
• Además se realizan en Pequeña Holanda una serie de festejos afines a las características del lugar.
LO QUE HAY QUE SABER
Cuándo: Sábados, domingos y feriados.
Dónde: Ruta 25 y Río Luján, camino al Paraná de las Palmas, Escobar.
Más información: www.pequenaholanda.com.ar