¿Cuántas veces, antes de maquillarte, te preguntaste si el rímel que guardás para ocasiones especiales no está vencido? ¿Y cuántas dudaste entre tirar o conservar una sombra que tenés hace más de un año? Los cosméticos, como las cremas faciales, tienen fecha de vencimiento, y seguir usando productos vencidos no solo se nota en el rostro sino que pueden generar daños en la piel y los ojos. Si sos de las que no tienen idea de cuándo renovar tus cosméticos, te ofrecemos una guía práctica para que sepas cómo detectar los productos vencidos, cuáles conservar, de cuáles deshacerte y qué comprar.
La información, en el producto.
La mayoría de los cosméticos tienen un símbolo en su envase que señala la duración del producto. Se trata de un pote redondo con la tapa semiabierta y un número en su interior, que marca los meses de vida útil. Si ese número es el 24, por ejemplo, tu maquillaje durará dos años. En productos cerrados, lo recomendable es mirar la fecha de fabricación y darle tres años de vida desde ese momento. Si las dudas persisten, también en el envase hay un código de lote que sirve para indicar a los comerciantes cuando se produjo ese maquillaje. Si ingresamos ese código a la página web checkcosmetic.net la aplicación nos devolverá decodificada el mes y año de elaboración.
La observación, fundamental.
Una de las claves para saber si es necesario renovar un cosmético es mirándolo: si su color cambió, su textura ya no es la misma que cuando lo compraste o tiene un olor extraño, es hora de tirarlo. Cuando el producto pierde calidad o se usa con mucha frecuencia y sin medidas higiénicas, es posible que se llene de bacterias que, entre otras cosas, pueden generar infecciones en los ojos y en la piel. En este caso, para no desechar un producto que todavía no venció, es recomendable comprar ese maquillaje pero en su tamaño más chico.
Uno por uno.
Si bien la duración de un maquillaje varía según su calidad, la marca, sus componentes y cómo los conservemos, los expertos coinciden, para cada cosmético, en un tiempo de vida útil específico.
Bases y correctores: De seis meses a un año. Las que cuentan con protección solar suelen durar un poco menos.
Polvos sueltos y polvos bronceadores: Al no contener agua, pueden durar hasta dos años.
Sombras de ojos: Los que son en polvo, hasta dos años. Si en cambio su textura es cremosa o en gel de seis meses a un año.
Delineadores: De 3 a 5 años. El tiempo de duración se incrementa ya que el producto se renueva cada vez que le sacamos punta. Los delineadores líquidos o en gel duran, en cambio, de seis meses a un año.
Rimel: Siempre y cuando no se sequen antes, tienen una vida útil de tres a seis meses.
Labial: Si no lo compartís y no tuviste infecciones en la boca que hayan dejado bacterias en el producto, el lápiz de labio puede durar hasta tres años.