Amamos tener flores naturales en casa pero además de estar caras, con el calor duran menos tiempo. Sin embargo con algunos pequeños tips podrás conservarlas por varios días.
1. Cortar las hojas de los tallos
Lo primero que debes hacer es quitarle el papel que las envuelve, colocarlas en el jarrón y cortar las hojas que queden sumergidas en el agua. De lo contrario, estas hojas contribuirán a la proliferación de bacterias dentro del agua y harán que las flores se marchiten mucho antes. En el caso de las rosas también es necesario quitar las espinas.
2. Cortar los tallos en ángulo
Si las cortas en diagonal, las flores absorberán mejor el agua. Hacé el corte con un cuchillo sin sierra o con unas tijeras especiales. Adapta la longitud al jarrón de manera que queden bien presentadas y bonitas y luego corta por la parte que corresponda. Intentá no cortar más de dos centímetros. La idea es cortar solamente la parte que haya podido secarse para permitir que la flor pueda absorber el agua correctamente. El jarrón debe ser lo suficientemente hondo como para que cubra entre 7 y 10 centímetros de la parte inferior de los tallos de las flores. No obstante, debes tener en cuenta que los tallos de las flores se van estropeando, por lo que es necesario que cortes un centímetro del mismo siempre en diagonal cada día para facilitar la absorción del agua.
3. Cuidado con el jarrón
Aunque muchas veces no lo pensemos y acabemos colocando las flores donde creamos que están más bonitas, la ubicación del jarrón también es muy importante. Es recomendable que estén situadas en un lugar fresco por la noche y que tengan una buena iluminación por el día pero que no estén expuestas directamente a los rayos del sol y alejado de aparatos electrónicos o de ventiladores, ya que la acción de estos hace que se deshidraten más rápido.
4. Nivel del Agua
Hay que tener en cuenta que el agua se va evaporando, con mayor rapidez en los meses de verano, y que es absorbida por las flores, por lo que el nivel de agua irá bajando. No obstante, no tires todo el agua, ya que perderás los nutrientes del primer día. Si se van estropeando flores, es recomendable que las vayas tirando para evitar que el agua del jarrón se ensucie. La eliminación de las hojas marchitas, pétalos y tallos estropeados es una labor diaria y minuciosa que resulta fundamental para mantener el buen aspecto de nuestro ramo de flores.
5. Temperatura del agua
La mayoría de las flores cortadas necesitan agua tibia como es el caso por ejemplo de las orquídeas, pero en el caso de las rosas o de las flores de bulbo es mejor mantener el agua fría. Las flores nunca deben estar en un lugar donde el agua pueda calentarse o expuestas de forma directa a los rayos del sol, especialmente en verano.
6. Una aspirina o gaseosa para mantenerlas vigorosas
Con el paso de los días las flores empiezan a necesitar un aporte de sales minerales que podemos proporcionar poniendo una aspirina en el agua, una cucharadita de azúcar o sal cada dos días o un cuarto de taza de Sprite o 7UP.
7. Vodka + Alcohol
Un truco que puede que no conozcas pero que resulta muy eficaz es el del tratamiento con vodka. Añade una cucharada de azúcar y 3 ó 4 gotas de vodka y disuélvelo en el agua del jarrón. De esta forma, evitarás que las bacterias proliferen y además le proporcionarás el alimento adecuado a tus flores mediante el aporte de sales minerales.
8.Vinagre
Para que luzcan más vigorosas, añade una cucharadita de vinagre y otra de azúcar por cada litro de agua.
9. EL cobre de las monedas.
Poner una moneda en el agua. Debes saber que el cobre de estas monedas puede ayudar a que tus flores duren más tiempo, ya que al oxidar el agua, evitan el crecimiento de hongos que pueden acabar marchitando tus flores de manera prematura.