1. La piel se seca y luce opaca
La piel necesita respirar durante la noche y producir las vitaminas y minerales que ayudan a tener una piel saludable y brillante. Pero si el maquillaje bloquea los poros, no podrá recuperarse.
2. Al dia siguiente, es más difícil sacarlo
En este caso, primero aplicá el demaquillante y después limpiá la cara con una leche o una crema de limpieza. A continuación, hacete una máscara para eliminar impurezas y luego humectate bien.
3. Evitá infecciones
El hecho de demaquillarse y limpiarse la cara por la noche tiene una doble función: eliminar los restos de productos cosméticos y las bacterias que la piel de la cara acumula durante el día. Si se acumulan sobre la cara, la ensucian y favorecen la salida de acné, por ejemplo.
4. Se debilitan las pestañas
De por sí, las pestañas son frágiles y si dejamos la máscara durante toda la noche, esos pelitos se van a secar y luego se pueden quebrar con facilidad.
5. Se tapan los poros
Irse a dormir con el maquillaje del día tapa los poros, que es por donde la piel respira. Durante las horas que dormimos la piel se repone y se nutre; si los poros están tapados, se impiden estas acciones. Los poros tapados se convierten en puntos negros y acné. ¿Cómo evitarlos? Sacándose el maquillaje cada noche y limpiándose correctamente el cutis.
6. Y… evitá manchar la almohada
Sí, no es lo más importante, pero cuando veas lo que cuesta sacar una mancha de máscara de pestañas de la funda… te vas a acordar de estas indicaciones.