Como es característico, Tommy Hilfiger apuesta a una paleta sobria, con pocos colores y estampados, que permiten armar múltiples conjuntos. Algunos toques de piel y un rescate del eterno pied de poule son algunas de los puntos altos de esta colección, que llegará a la Argentina. Otro de los highlights es la sastrería, impecable, algo a lo que nos tiene acostumbrados la tradicional firma. Botas cortas y altas y botinetas, el complemento perfecto de una colección sin fisuras.