“Se trabajó en la Casa TH para recuperar la ambientación que se había perdido luego de sucesivas intervenciones realizadas a lo largo de muchos años en los que la casa estuvo alquilada. Además se buscó adaptar su funcionalidad al uso propio de una familia de hoy, bastante diferente al de la época de su concepción original”, explican desde el Estudio Gicovate, compuesto por el arquitecto Martín Gicovate y la paisajista Susy Gicovate.
Puntos clave
* Principalmente se trabajó sobre la planta alta, adaptando baños, dormitorios y vestidor.
* En la planta baja, se dio renovada función a las áreas de cocina, lavadero y servicios, a las que se les incorporó un techo enjardinado para una muy buena aislación térmica, y para ofrecer excelentes visuales desde la planta alta. Es una solución con sentido ecológico, muy utilizada cuando se busca la preservación del medio ambiente. Para lograrlo, se tuvo especial cuidado en la construcción de la aislación hidráulica de la cubierta de la losa.
* Para incorporar fácilmente un sistema de calefacción por pisos radiantes, se cambiaron los solados. Se colocó en la planta baja uno de hormigón armado pulido tanto para el interior como para el exterior, que además aportó una estética que conjuga con la arquitectura de la casa. Para la planta baja, se utilizó un solado epoxi blanco muy fresco y juvenil, que acentuó el predominio del blanco en toda la ambientación interior.
“Trabajamos en el rediseño de las áreas semi cubiertas, galerías y porche”, explican en el estudio y añaden que “respetamos la vegetación existente colocando una cubierta de tablas de madera pintadas de blanco que ocultan planchas de policarbonato que protegen de la lluvia”.
* En el gran muro del frente que se construyó en reemplazo de la reja original se respetó el uso de la piedra, que se complementa muy bien con la superficie brillante y pulida del acero zincado de portones y puerta de acceso.
* El porche-cochera de ingreso, cubierto por la continuación de la losa del estar, pasa libremente por sobre el volumen del hogar.
* El hormigón armado de la parrilla es el remate visual de los efectos logrados con el jardín vertical.
* La prolongación de la mesada dentro del vano, sirve de apoyo a un viejo macetero de madera. Como fondo se visualiza el jardín y la pileta.
* Donde termina el volumen de servicio, se amplía el fondo y se genera un agradable solarium, enfrentando la pileta que se recorta sobre el césped a la manera de un estanque suelto.
La ambientación
Prevalece en ella un criterio descontracturado, informal y contemporáneo. Se eligieron muchos muebles vintage y otros comprados en Ikea (EEUU).
En cuanto al hall de acceso, remata en una elegante escalera circular que asciende «despegada» sutilmente de los muros que la rodean y que desemboca en la planta alta en un hall íntimo. Allí un gran ventanal mira al jardín y los techos verdes por donde ingresa agradable luz natural tamizada por toldos blancos.
El estar comedor es un espacio muy despojado y abierto, resultado del diseño de una estructura portante despojada, con solo una columna central oculta en la mampostería que configura el mueble bar que divide el comedor del hall. Así este gran ambiente, abierto al jardín del frente y al del contrafrente, resulta luminoso y muy integrado al entorno. Una colección de sillas Vitra impacta en un rincón (ver foto de tapa Moradas).
Ficha técnica
Nombre de la casa: TH
Estudio Gicovate: Martín Gicovate arquitecto y Susy Gicovate, paisajista.
Mail: gicovate.arquitecturaypaisaje@gmail.com