El showroom de Julián Cuneo es un mundo mágico, donde las lámparas no son simples luces sino esculturas lumínicas, sus diseños juegan con las formas y sus productos tienen un límite muy difuso entre la obra y el producto. Estudió diseño industrial en la universidad de Palermo. Pero también estudió química, artes plásticas y fotografía. “Me gusta trabajar con las manos y explorar todas las posibilidades de las técnicas productivas. Luego de pasar el suficiente tiempo probando, modificando, jugando, rompiendo, quemando, atando, pegando, encuentro la esencia propia a la forma y ahí es cuando se concreta la pieza”. Se recibió hace cinco años y desde ese momento desarrolla diversos proyectos de diseño: Iluminación, mobiliario, decoración y accesorios de moda. Lo que todos tienen en común es el trabajo con artesanos. “Me interesa mantener las profesiones pero interviniendo sobre ellas. Más que la nostalgia por lo hecho a mano me interesa las posibilidades del objeto post industrial. Trabajo junto a un grupo de amigos y se que la buena vibra del taller se ve en el producto final. Un objeto que estuvo horas en las manos de alguien viene cargado del esfuerzo y de la nobleza del material”.
.¿Cómo es tu proceso creativo?
El diseño me aportó un método y los conocimientos sobre técnicas, pero encontré en el arte las herramientas para explorar terrenos novedosos. Trabajo con dos métodos en simultáneo, uno más bien explorativo y otro más proyectual. Como artista me dedico a la creación, sin coartar mucho las ideas. Casi todos mis diseños están relacionados con alguna de mis esculturas. Por otro lado como diseñador proyecto productos concretos, con cualidades funcionales, controlando costos y adaptados a un mercado objetivo.
¿Con qué tipo de materiales te gusta trabajar?
Además de la soga de algodón utilizo maderas de fuentes sustentables, por ejemplo la poda de árboles de la ciudad y los metales dúctiles como el cobre, el bronce y la alpaca ya que se pueden trabajar martillándolos en frío para darle forma a diversas piezas: cuencos, bandejas y quizás lámparas. Con esta técnica hago los botones con mi firma para mis bolsos. Por suerte tengo un estudio grande con talleres dedicados a cada técnica. Esto me permite desarrollar en simultáneo varias piezas. Ahora estoy pintando y tallando madera, a la par que estoy diseñando la nueva temporada de bolsos y una serie de macetas y cubre macetas. Me gusta tener muchos proyectos a la vez. Además, pinto, estoy preparando una serie de pinturas que están muy relacionadas con los mandalas y la escritura automática. Son cuadros hipnóticos en ellos vuelco mi proceso de meditación y relajación.
¿Y cómo llegaste al mundo de la moda?
El primer producto textil que hice fueron las lámparas, los presenté en la feria Puro Diseño en 2015. Como tuvo mucha repercusión surgieron las vasijas decorativas. Las realizo en diversos formatos desde platos, canastos bowls, cuencos, vasijas. Realizando estos desarrollos surgió la idea del bolso. Primero quise hacerme una mochila para mí para llevarme de viaje. Aunque resultó ser más compleja de lo que parecía en ese desarrollo idee el bolso tote. Justo fue en la época de Puro Diseño 2016 en la cual presenté junto con las lámparas una serie de muebles, alfombras y vasijas, centro de mesa y mas objetos decorativos texiles. Dentro del espacio del stand coloqué alguno de los bolsos que estaba desarrollando. Fueron un éxito rotundo. Nadie vio siquiera los muebles que pasaron a ser simplemente el soporte. Ahi entendí el camino que me dictaba el mercado y me dedique de lleno a los bolsos. Desarollé cuatro modelos, un sobre de fiesta, una cartera bandolera, un tote y porque los bolsos siempre pueden ser mas grandes el tote XL.
A mitad del año pasado Belén Amigo me invitó a asociarme con ella en Universo, su local en Recoleta: Los diseñadores que Belén unió en el local funcionan bárbaro juntos. Esta centrado en indumentaria y accesorios pero también expongo una pequeña variedad de mis piezas decorativas como alfombras, vasijas y lámparas. También hay una exquisita selección de objetos de otros diseñadores y antigüedades. Sigo aprendiendo del mundo de la moda pero sin descuidar la decoración.
¿Es muy dificl hacer diseño en Argentina?
La facultad me enseño a diseñar para la industria europea. Intenté trabajar diseñando para un par de fábricas pero realmente me encontré que las posibilidades de desarrollo creativo eran casi nulas. Por ello me dediqué a armar mi propio proyecto. Lo cual no es nada fácil pero presenta grandes satisfacciones.
Texto: Karina Bianco