Walter Knoll es reconocida como una de las marcas de muebles moderna con mayor trayectoria y calidad. La compañía fue fundada en 1865 como una tienda de cuero en Stuttgart, Alemania, y al día de hoy continúa haciendo historia creando piezas clásicas y varios íconos de la vanguardia.
Pocos meses atrás, presentó sus nuevas líneas de muebles en una de las más importantes ferias europeas, la IMM Cologne, (Colonia, Alemania).
En ese ámbito, la empresa se destacó con un stand de diseño simple que llevaba al visitante a un viaje sinuoso a través de diferentes espacios, cada uno con sugestivas puestas en escena.
Esos ámbitos estaban delimitados por una cortina de fibra de carbono negro que fue desarrollada especialmente para la exposición. Este material innovador permite una relación transparente y fluida de un lado y del otro, y a la vez alimentar la curiosidad al cambiar el punto de vista. De frente a los pliegues, la cortina aparece casi totalmente transparente, sin embargo, desde otros ángulos la visión se va perdiendo.
Este telón proyectaba un juego de sombras en todas direcciones, cautivando aún más la atención del visitante. A su vez, las lámparas diseñadas especialmente incorporaban una película de espejo que producía reflejos fascinantes y servían como fuente de luz.
En el interior del stand, la metamorfosis de la tela de fibra de carbono se vió reforzada por las paredes pintadas en colores fuertes y sensuales inmediatamente detrás de la cortina. Cada campo de color presentaba un nuevo escenario especial que ofrecía una ambientación por grupos de productos específicos. Los separadores de ambientes presentaban diferentes superficies y las imágenes proporcionaban un fondo tranquilo y daban un contexto a los productos.
No solo se presentaron muebles, también se lució la colección de alfombras de Walter Knoll. Las alfombras de seda se exhibieron en las salas de estar y también como un elemento decorativo en las paredes.
Texto: Arq. Paula Baldo.
Fotos: gentileza Estudio IPPOITO GLEITZ Group.