El espacio, que el diseñador Sandy Cairncross llamó “Presente Perfecto” obtuvo dos importantes reconocimientos: el “Premio DArA al mejor diseño interior”, en este caso por segunda vez, y el “Premio Colorín al mejor uso del color”.
El espíritu con el que se diseñó este espacio se resume en una frase, según las propias palabras de su creador: “El pasado partió; entonces, suéltalo, el futuro pronto arribará: sueña con el, pero el presente es hoy, vívelo plenamente sin arrepentimientos”. Y Sandy explica: “Mi ambición es que el público disfrute de un espacio finamente pensado y los invite a una reflexión que, al menos para mí, es fundamental”.
Se partió de un papel inglés, elegido para una pared del estar, con fotos de caballetes
repletos de frascos llenos de pinceles, lo que detonó en el decorador infinidad de cosas, no solo respecto a los colores que de allí se desprendían sino también en el layout de muebles y objetos. Hay objetos tibetanos, que le aportan carácter y sofisticación al espacio. Algunos muebles, como la mesa del comedor, se fabricaron a partir de tablas que fueron especialmente diseñadas para el espacio. Cairncross destaca que “el tono de azul elegido, de Colorín, se hermanó de forma impactante con el papel de pared, el de los graciosos pinceles. El resto de los ambientes se trabajaron en verdes y amarillos, auténticos complementos a ese azul.”.
El clima del espacio se sostiene fuertemente a través de la fusión de objetos, colores y texturas logrando así un diseño ecléctico que lo distingue.
*Diseñadores de Interiores Argentinos Asociados
Texto: Florencia Romeo.
Fotos: Adela Aldana