Capital del condado croata de Dubrovnik-Neretva, esta ciudad que se recuesta sobre el mar Adriático fue nombrada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1979, bajo los criterios “genio creativo humano, testimonio de tradición cultural e importancia en la historia de la humanidad”.
Es que esta ciudad fue una importante potencia marítima mediterránea desde el siglo XIII. El orgullo de la ciudad, su riqueza y cultura se reflejan en sus hermosos monumentos, iglesias, monasterios, palacios y fuentes de estilo gótico, renacentista y barroco, muchos de los cuales sobrevivieron a los estragos provocados por el gran terremoto de 1667, que le dio a la ciudad un clásico declive.
Asimismo, la ciudad sufrió importantes bombardeos el 6 de diciembre de 1991 durante la guerra contra Serbia, que ocasionó una gran destrucción, aunque se ha reconstruido y hoy luce extensas zonas en un estilo muy moderno. De todos modos, conserva gran parte de su historia, ya que fue una ciudad muy importante en la Edad Media, donde se situaba en el camino que unía Europa con Asia. Es así que su ciudad vieja ostenta las huellas de la ocupación de los bizantinos, los venecianos, los húngaros y los turcos.
Dubrovnik es una muestra notablemente bien conservada de una ciudad amurallada de la baja Edad Media, con un trazado urbano regular.
Su patrimonio
Dubrovnik esta rodeada por una gran muralla que alberga 16 torres. Las murallas datan del siglo X, aunque fueron restauradas en el siglo XVII. En total suman 1940 metros, con un grosor de 6 metros hacia tierra y 3 hacia el mar. Su altura es de 25 metros.
Entre los notables monumentos medievales renacentistas y barrocos dentro de las magníficas fortificaciones y las puertas monumentales de la ciudad, se encuentran el ayuntamiento del siglo XI (el actual palacio del rector); el monasterio franciscano (terminado en el siglo XIV, pero que ahora tiene un aspecto predominantemente barroco) con su impresionante iglesia; el monasterio dominicano; la catedral (reconstruida después del terremoto); la aduana (palacio Sponza) y varias iglesias barrocas, como la de San Blas, el santo patrón de la ciudad.
Originalmente, la zona considerada Patrimonio de la Humanidad estaba limitada a las murallas y lo contenido en su interior. Mas tarde se amplió para incluir el suburbio industrial medieval de Pile, una urbanización planeada en el siglo XV, y la fortaleza Lovrijenac, situada sobre un acantilado, cuyo origen data probablemente del siglo XI, pero cuyo aspecto actual corresponde a las construcciones de los siglos XV y XVI. También se incluyó el Lazareto, construido a inicios del siglo XVII para aislar a los potenciales portadores de plagas procedentes del extranjero; los rompeolas de Kase de fines del siglo XV, levantados para proteger el puerto de los vendavales procedentes del sudeste; y la fortaleza Revelin, que data de 1449 y que fue construida para dirigir el foso de la parte norte de la ciudad.
Los barrios
* El barrio de Ploce alberga numerosos edificios importantes, como el mencionado Fuerte de Revelin y el Fuerte Imperial, creado por Napoleón en 1808. Si queremos obtener una panorámica perfecta de la ciudad, éste es el lugar.
* El Barrio Pile, al que accedemos por la Puerta del mismo nombre. Aquí encontramos el castillo de San Lorenzo con sus anchas murallas. Este precioso lugar se utiliza como escenario para actividades del Festival de Verano de Dubrovnik. Para entrar en él debemos abonar un pequeño importe. Además en este barrio se encuentra el hotel más antiguo de Dubrovnik, el Hotel Imperial, dañado fuertemente durante la guerra con los serbios.
* El Barrio de Lapad, se encuentra en la zona occidental de Dubrovnik, bajo el monte Petka. Aquí es dónde se ubican la mayoría de los hoteles de Dubrovnik, y se le denomina Babin Kuk. Sus construcciones góticas son muy bellas. Encontramos además de la Iglesia de la Virgen de la Misericordia, el Museo Arqueológico y el Museo de Historia Moderna.
Playas doradas
En verano se impone un baño en la playa Gradska Plaza o “playa de la ciudad” que se encuentra junto al Lazareto, detrás de la Puerta Ploce, además de otras muchas ubicadas en lugares cercanos y a las que se llega cruzando en ferry hasta la isla de Lokrum, donde se ubica un Parque Nacional, las ruinas de un monasterio benedictino, el Jardín Botánico y una preciosa playa rocosa reservada para nudistas.
Más excursiones
* Un paseo obligado es la visita al valle situado al sur de Dubrovnik, concretamente en Cilipi, donde podremos disfrutar de las tradiciones más autóctonas de la zona: equitación, ecoturismo, pesca nocturna y observar las costumbres de los lugareños. Allí existe un mercado los domingos, en el que podemos ver la auténtica seda croata y deleitarnos con los trajes típicos y los productos artesanales. Además, Durante la misa del domingo en la Iglesia de San Nicolás, los lugareños sorprenden con un bailes típico.
* Otra de las localidades que se puede visitar es Catvat, a unos 20 minutos de Dubrovnik, un bonito lugar pesquero y con una gran arquitectura.
* Otro lugar es el pueblo de Vid, a unos 50 kilómetros de Mostar y muy cerca de Dubrovnik. Se trata de un pueblo con unos centenares de habitantes que guarda bajo su suelo tesoros dignos de admirar. Existen vestigios de Roma en cualquier esquina del pueblo, además merece la pena dar una paseo por el valle, cerca del río Norin, para unas vistas impresionantes. ¡Y son deliciosas sus mandarinas!
* Y si la idea es conocer todos los alrededores de Dubrovnik, hay que llegar hasta Ston, a unos 60 kilómetros, una de las primeras ciudades europeas que se construyó en base a una planificación urbanística, con murallas de más de 5 kilómetros de longitud. El lugar es famoso por sus salinas y si hay tiempo, conviene conocer las granjas de ostras y mejillones, probar sus frutas y verduras del mercado.
* En los meses estivales podemos acudir a Trpanj, encuentra situado a hora y media de Dubrovnik. Es todo un espectáculo presenciar las actuaciones de grupos de Klapa, que cantan a capella, conciertos, degustaciones de productos típicos.
* A una hora de Dubrovnik se encuentra la zona litoral de Montenegro, donde se puede visitar Kotor, un lugar famoso por su flota mercantil.
* Y si seguimos la ruta llegamos a Cetinje, repleta de monumentos arquitectónicos de gran belleza, entre los que se se encuentra el Museo Del Rey Nicolás.
* También hay otras islas que se pueden visitar, además de la ya mencionada Isla de Lokrum. Una es la Isla de Sipan, un lugar plagado de castillos y fortificaciones romanas y venecianas…Esta isla forma parte de las tres que componen las Islas Elafiti (las otras dos son la isla de Kolocep y la Isla de Lopud), caracterizadas todas por su vegetación, su naturaleza y sus ruinas griegas y romanas. vegetación digna de cualquier jardín botánico.
Sabores y miscelánea
Qué comemos. La gastronomía de esta ciudad costera impone que saboreemos en algún lugar la bouzara, un guiso de cigalas, y también el cevapi, una especie de salchicha de carne a la parrilla.
La noche. Para disfrutar del ambiente nocturno, nada mejor que ir a la calle Prijeco, llena de terrazas con un ambiente muy chic donde es posible escuchar música y saborear tragos y exquisiteces.
Dónde comprar. Una jornada de compras en Dubrovnik puede ser muy divertida, en el Centro Comercial de Novi Stradun, que está en el Barrio de Lapad, se puede encontrar todo lo que busquemos para llevarnos de recuerdo. También podemos comprar joyas en la Placa.
Cómo llegar
* Hay vuelos diarios entre Dubrovnik y Zagreb, capital de Croacia.
* También existe una eficaz red de autobuses que une a esta ciudad con la mayoría de poblaciones a precios económicos.
* El aeropuerto de Dubrovnik está situado a 22 kilómetros de la ciudad y la estación de autobuses se encuentra en la calle Put Republike 38.
* Si queremos utilizar el transporte ferroviario tendremos que tener en cuenta su lentitud a pesar de disfrutar de una mejor comodidad.
Texto: María Luengo