Esta bebida goza de gran popularidad en toda la costa del Mar del Norte para combatir el frío y debe su nombre de Pharisäer (Fariseo) a una historia. Había una vez en una comunidad de Frisia un pastor evangélico que luchaba de manera incansable desde el púlpito contra el excesivo consumo de ron por parte de los feligreses, honrados, campesinos y pescadores. Cuando se cansaron de escuchar la eterna bronca que el pastor les echaba por su bebida favorita, acudieron a una estratagema. En los bautizos y bodas bebieron el ron con el café, pero cubierto de una capa gruesa de crema de leche para que no se escapara el aroma. Por supuesto, al pastor le servían el café sin alcohol. Este no dejaba de maravillarse de lo rápido que se entonaban todos a su alrededor mientras que él era el único que permanecía sereno, hasta que un día a él también le sirvieron una taza de café con ron, fruto de un descuido. Bebió y luego grito, indignado: “Ah, fariseos” y así quedó bautizada la bebida.
PHARISÄER
Ingredientes
(para 1 trago)
5 cc de ron oscuro
3-4 cucharaditas de azúcar
Café fuerte muy caliente, para completar
1-2 cucharadas de crema de leche batida
Preparación
Precalentar un vaso para café o una taza. Verter el ron, también previamente calentado. Agregar el azúcar y revolver. Llenar con café hasta completar ¾ del recipiente. Terminar con una buena cucharada de crema de leche batida. Servir enseguida, para que no se enfríe.
Fuente: “Bebidas famosas del mundo”, de Ed. Everest.