¿Quién dijo que es fácil? No. Volver al trabajo después de un tiempo fuera siempre es una tarea compleja. No importa la razón por la que se haya dejado el empleo, las dificultades son muchas. En especial, como sucede en la mayoría de los casos, cuando a la salida se era una mujer sin hijos y a la vuelta se es madre. Pero no sólo para quienes vuelven de licencias por maternidad extendidas o que directamente renunciaron para dedicarse a la crianza, el volver al ruedo se convierte en una prueba a superar: retomar, posicionarse en el mercado, actualizarse en el área, darse a conocer, valorar el currículum y encontrar un empleo acorde a las nuevas necesidades es fundamental para que el regreso no sea frustrante. Así que, paso a paso. “Para empezar, es central que se tenga en claro la decisión de volver: tener motivación y verdadera convicción para hacerlo, cuando no sea necesidad. Con proponerse una misma el objetivo de lograrlo, las posibilidades de fracasar son bajas”, explica María Abeal, senior consultant de la división de Ingeniería de PageGroup, psicóloga con especialización en psicología laboral y encargada de reclutar de profesionales en la empresa.
Además de su profesión, ella misma ha dejado varias veces su trabajo tanto por maternidad, en dos ocasiones, como por mudanzas al exterior y, de hecho, ahora vive y trabaja en los Estados Unidos. Desde allí, mira la tendencia en el mundo y en la Argentina: “Todavía no hay en las empresas el dinamismo para que la gente se vaya y vuelva. Entonces, el terror a no poder volver se transforma en no irse nunca en algunos casos. Pero así y todo, muchas mujeres se animan. Y yo aconsejo hacerlo si las prioridades están en otras cosas”, remarca desde la experiencia personal la especialista y asegura que tanto para irse como para volver, lo que hay que hacer es pensar en lo que se quiere y decidir. “Porque resignar, siempre se resigna algo”.
Estos son sus consejos para regresar, sostener el regreso y no frustrarse en el camino:
-Dependiendo del tiempo que se haya estado fuera, hay que poner en orden las prioridades: horarios, salario, flexibilidad, posición. Cada una debe decidir qué es lo que está buscando para poder dirigir su atención y búsqueda lo más específicamente posible.
-Si se estuvo fuera un tiempo largo, se debe ser consciente de que no es posible volver al lugar en el que hubiera estado si hubiera seguido: saber resignar salario y posición es fundamental para volver. No es dramático: si se quiere volver de verdad, eso no debe ser un problema. Luego hay tiempo de demostrar el conocimiento. Ojo, tampoco irse al otro lado: la sobrecalificación notable de un empleado no es buena para la persona ni para la empresa.
-Empezar por avisar a todos los conocidos, amigos, ex empleadores, colegas, etc. que estás buscando trabajo: en la actualidad el net working a través de las redes sociales tiene un rol fundamental en lo laboral. Pero también decírselo a la chica del gimnasio, a la vecina y a los invitados del cumpleaños de tu amiga. Nunca se sabe desde dónde puede llegar una oportunidad.
-Meterse en las redes sociales y los portales de búsqueda de empleo: en la actualidad la red LinkedIn y los portales Zonajobs y Boomeran en la Argentina son los mejores lugares dónde ver qué hay y encontrar la mayor oferta.
-Armar el currículum y ofrecerlo con honestidad hacia vos misma y lo que estás buscando: zona geográfica de trabajo, qué tipo de posiciones, qué salario mínimo necesitás, cuántas horas podés dedicar y en qué horarios. Ser honesto con las prioridades simplifica la búsqueda, mejora el resultado e incluso abre puertas nuevas: la necesidad de volver al ruedo permite que aparezcan oportunidades que no se tenían en cuenta, incluso cosas nuevas en las que ni siquiera se había pensado.
Además de todo eso, si sos mamá, es importante tener en cuenta estos temas:
-Ordenar efectivamente las prioridades en todos los niveles; cuáles son las prioridades macro y las micro, tanto en casa como en el trabajo. Tenemos la habilidad por naturaleza de operar en multitasking, utilizar eso a nuestro favor.
-Después de una licencia por maternidad convencional o extendida -Cuando la vuelta se produce después de tener familia, es necesario prepararse apara que todo sea lo más feliz posible: si hay frustración, que no sea por falta de previsión: organizar la logística familiar de manera tal que sea sostenible en el tiempo y se pueda establecer una rutina viable. Eso es tan importante para los niños como para nosotras. Para lograrlo, se aconseja incorporar a la logística un plan B y un plan C desde el inicio, además de –fundamental- contar con una estructura de sostén: sea ésta la pareja, la familia, los amigos o los vecinos, etc.
-Lograr flexibilidad responsable con nuestro empleador. Si bien hay muchas compañías que han incorporado prácticas de softlanding a la hora de regresar al puesto laboral; muchas no lo han hecho pero eso no impide que podamos volver al ruedo de manera exitosa. Es clave una buena comunicación con nuestros reportes.
Ahora sí, empezá a prepararte para que la vuelta al ruedo sea feliz.