Hay una edad clave en la vida lectora de las personas: el salto de la niñez a la adolescencia es también un salto en la capacidad de comprensión y en la complejidad del contenido. Lo dicen los especialistas, quienes señalan que la clave de que los chicos lean o no, además de los estímulos que pueden tener, es que encuentren el libro adecuado para sus gustos y su edad.
“Cuando me preguntan qué leen los adolescentes pienso siempre que todo cuando pasa por sus ojos ya que las historias se multiplican hoy en libros y pantallas y que la pluralidad de soportes no va en desmedro de la lectura sino muy por el contrario. Van desde allí a los libros también”, dice Adriana Fernández, Gerente Editorial del Área de Literatura infantil, juvenil y contenidos de Grupo Editorial Planeta Argentina. Explica Fernández, con trayectoria y experiencia en este segmento, que –al contrario de los prejuicios sobre ellos- los más jóvenes son devotos de lecturas extensas: “Por eso, los editores no tenemos temor de publicar libros largos con historias de personajes intrincadas, árboles genealógicos complejos y la promesa de la continuidad: las sagas son una pasión”.
Por su parte, María Amelia Macedo, editora de infantiles y juveniles de Pengüin Random House, dice: «Desde hace ya unos cuantos años la venta de libros para chicos y jóvenes viene creciendo de forma fuerte y sostenida en todo el mundo, y Argentina no es una excepción. El crecimiento se da danto en el segmento denominado middle grade –que va desde los 7 a los 12 años– como en el juvenil, que se podría pensar a partir de 12 pero que también, en muchos casos, llega a lectores adultos jóvenes».
Los chicos, con derecho a elegir
“El final de la primaria -o los albores del final- marcan un límite también en el tipo de lectura de los chicos. Hasta entonces, son los padres los que eligen y los que compran”, comenta Fernández, que recomienda “La vuelta al mundo en 101 libros para chicos”, de Natalia Blanc, como un faro sobre la mejor literatura que existe para los chicos desde los dos a los doce años. Según la editora, con mayor o menor precisión respecto del momento, cada chico comienza a elegir lo que prefiere, pero hay tendencias: “La novela es el género por excelencia: realismo dramático, fantasy, géneros derivados de la ciencia ficción tradicional”.
Macedo coincide: «En cuanto a tendencias, hoy en día conviven todos los géneros que te mencioné (el fantasy, las distopías, las novelas realistas, las novelas de amor) y en las grandes apuestas internacionales se empieza a observar un giro hacia los thrillers protagonizados especialmente por chicas adolescentes».
Pero también hay un fenómeno nuevo: autores que nacen con las redes sociales y que primero tienen un público fiel y luego deciden publicar para ellos.
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