No hay más transversalidad que en Londres. Bajo las melodías de estilismo que sólo allí suceden, el rock se mezcla con la opera, el trap con el jazz… y de la nada surge el equilibrio. Salimos a recorrer los estilos más emblemáticos de la ciudad que, además, acaban de dar nuevos toques a sus perfiles.
Oriental London style
La última novedad es la reapertura del Mandarin Oriental Hyde Park. El sitio exuda una atractiva combinación de elegancia y lujo. El edificio data de la década de 1880, abrió sus puertas como condominio exclusivo de apartamentos para solteros ricos. Sir Winston Churchill vivió en el hotel por un tiempo y era conocido por ofrecer a los camareros del servicio de habitaciones dos puros a cambio de la entrega de un desayuno tempranero.
Un tema de actitud
«Esa pequeña cosa que marca una gran diferencia» es la frase que marca el Hyatt The Churchil. Reabierto tras una renovación, implicó a la familia del célebre Winston para dotarlo de su impronta. Pasar la puerta es entrar a un mundo con horizontes amplios y elegancia entre austera y ostentosa. Arte original, detalles de botones y piezas de muebles de firma que no solo reflejan el amor de Churchill por la artesanía, sino que también celebran la industria británica de sastrería.
El diseño intelectual
Uno de los relanzamientos más significativos de Londres llega de la mano de Martin Brudnizki, quien ha reformado The Bloomsbury. A pasos del British Museum, Soho, Covent Garden y Theatreland, el edificio original de los años veinte es una célebre obra arquitectónica de Edwin Lutyens. atrevido restyling, con muchos patrones fuertes, formas de decoración y gran atención a la textura, es hermoso y cautiva.
En el corazón de Chelsea
Un tesoro para los amantes del arte es el Belmond Cadogan. Este santuario de Sloane Street guarda más de 430 obras originales. Único entre los hoteles de lujo, todas y cada una de las habitaciones y suites cuentan con una pieza de cabecera original encargada a un artista con un estilo visual diverso.
Con la corona a cuestas
El emblemático The Ritz data de 1906. Enclavado en Mayfair es el sinónimo de realeza. Su estilo Luis XVI puede alcanzar ribetes impensados, como suites con piano de cola, mayordomo o transporte de lujo al aeropuerto. Sigue siendo uno de los hoteles más emblemáticos del mundo y con buena razón. Es furor entre los instagramers, el jet set y la fashion industry.
Alto en el cielo
La elegancia en altura del el Shangri-La, At The Shard se esconden entre los pisos 34 y 52 del mítico edificio de Renzo Piano. Los ventanales del piso al techo hacen de la ciudad el eje de toda la deco. Los interiores son elegantes y súper modernos, repleto de detalles. La decoración asiática reúne orquídeas, garzas, árboles de bambú, piezas brillantes y puertas corredizas.
Texto: Flavia Tomaello