PEPINO: el pepino es rico en vitamina E, aceites naturales y agua que ayudan a hidratar y dar vitalidad a la piel, además aumenta la frescura del rostro y es un antiinflamatorio natural. Cómo: pelá un pepino bien frío, cortá dos rodajas para los ojos y licua el resto. Aplicá sobre la piel limpia y seca durante 20 minutos. Retirá con agua tibia. Tip: podés agregarle aceite de oliva y miel para enriquecerlo.
TOMATE: Ideal para después de tomar sol, hidrata pero también exfolia y tensa. Simplemente cortá un tomate a la mitad y pasalo por tu rostro. Dejalo actuar durante 15 minutos y retiralo con agua tibia.
LIMÓN: el limón es perfecto para las manchas. Mezclá una cucharada de miel de abejas con otra de jugo de limón. Aplicala con un algodoncito en la piel del rostro y déjala durante 20 minutos. Retirala con un algodón limpio y agua tibia. TIp: no lo hagas antes de exponerte al sol.
FRUTILLAS: tienen un gran poder de hidratación y nutrición. Triturá varias frutillas y mezclalas con miel. Aplicá esta crema en tu piel y dejala actuar por 20 minutos. Retirala con agua fría o tibia.
BANANA: nada más simple que esta máscara que lleva a tu piel todo el poder nutricional de la banana. Pisala o licuala y aplicala en la piel directamente. Dejala actuar por al menos 15 minutos y retirala con agua tibia.