“Como pez en el agua”. Así define Pía Slapka su relación con la moda. Es que comenzó desde muy chica a formar parte de ella. A los 13 lo tomaba como un hobby, pero a los 16, ya como un trabajo. Con la responsabilidad que la caracteriza hasta hoy en día. Durante todo ese tiempo su vida dio varios giros profesionales y personales. Se casó con el empresario Paul García Navarro, presidente de la Agencia de modelos Multitalent, tuvo dos hijos (Benjamín, de 7 años y Gerónimo, de 3), trabajó como modelo, y poco a poco se fue metiendo en el mundo de la conducción. Pudimos verla por ejemplo como una experta de la jardinería y de la cocina en el ex canal Utilísima o en Tu vida más simple por Fox Life, presentada por Mariano Peluffo, siempre entrando con enormes tacos y corriendo ágilmente. O fue jurado en El emprendedor del millón, junto a Andy Freire y Ricky Pashkus, para evaluar a emprendedores y sus ideas. ¿Multifacética? Sí, multifacética.

–¿Se puede ser y hacer tantas cosas a la vez sin morir en el intento?
–Sí, creo que uno puede hacer muchas cosas. Cuando sos madre, también podés ser profesional. Son cosas que pueden ir de la mano. Pero es necesario estar bien organizada. Además, en mi caso, todas esas actividades que hago se me fueron dando de a poco. Fue como muy paulatino. Fueron diferentes facetas que se sumaron a lo largo de los años. Y todo lo hago con pasión. Lo disfruto mucho. Mi carrera como modelo, el camino de la conducción que es un desafío que me genera muchos nervios… También ser madre, que es lo que le da sentido a mi vida. La clave es esa: pasión y disfrute. La verdad que todos estos años estuve en un proceso para no perder la capacidad de disfrute. El disfrutar esto de ahora. Estar acá. Lo abrazo y lo agradezco.

–¿Cómo se llega a esto?
–Es un ejercicio: proponerte disfrutar de tu propia vida. Y si querés un cambio, empezar a actuar para que se produzca. Porque solo no va a surgir. Agradezco todos los días cuando me levanto, el hecho de poder prepararle el desayuno a mi hijo y llevarlo al colegio. Entonces, claro, la vida se te hace mucho más liviana en un punto. Es romper con el fastidio. Empezar a ver lo positivo de la vida. Podés ver lo malo o lo bueno. Yo hace muchos años me propuse ver lo bueno. No es que no me enojo, pero elijo esto y la vida es mucho más plena.

BIEN PROFESIONAL
Será por esa mirada positiva que le da a la vida, que esta no para de sorprenderla. Su paso por la conducción en Utilísima hizo que otro de los grandes conductores del canal, Mariano Peluffo, se fijara en ella y la convocara desde su productora Salta Violeta, para ser jurado (junto a Andy Freyre y Ricky Pashkus), del programa El emprendedor del millón, un reality en el que 18 participantes competían para ganar $250.000 para poner su propia empresa. Pía no dudó en aceptar y eso hizo que siguiera por otra temporada más.

–¿Cómo fue la experiencia como jurado en el programa?
–¡Me encantó! Fue una experiencia buenísima. Primero porque era un rol diferente. Era jurado y tenía que evaluar junto a mis compañeros, todos los emprendimientos que traían los participantes. Cada uno con una visión diferente. Pero creo que todos somos emprendedores. Desde nuestro lugar. La verdad que, como experiencia, fue genial. Como que me vi yo también desde otro lugar. Fueron jornadas muy largas. Nos llevamos muy bien entre los tres. Y bueno, ni hablar con el equipo. Re agradecida a Mariano Peluffo de que me haya convocado y confiado en mí.

–Al final, ¿arranca la tercera temporada?
–Íbamos a empezar a prepararla ahora, pero no se dio. Tenía todo cerrado, marcado en el calendario, pero bueno… Son cosas que pasan.

–¿Estás con algún otro proyecto actualmente?
–De tele aún no tengo nada, pero puede cambiar de un momento a otro. Yo voy ocupando la agenda semana a semana (risas). Así como tenía todo organizado para grabar El emprendedor…, de golpe lo tuve que levantar. Y estoy haciendo La Ruta de la moda, que es como el Fashion week del interior. Así que estoy viajando por casi todo el país.

–¿Tenés pensado para dónde querés encarar tu carrera próximamente?
–La moda no la voy a dejar. Gracias a Dios me siguen convocando y sería una picardía decir que no. Después de tantos años de trabajo y de tanta dedicación decir que no sería como tirar a la basura todo eso creo yo. Además todavía el cuerpo me da (risas). Lo cuido, obvio. Y mi meta, mi objetivo de hoy, es seguir preparándome para la conducción. Para sentirme cada vez más cómoda en ese rol y seguir adquiriendo experiencia. Se me abrió otra puerta, la gente lo está recibiendo súper bien, porque me llaman para conducir eventos, lanzamientos, presentaciones de marcas importantes. Así que bueno, el camino se me está abriendo para ese lado y me preparo para eso.

–Hablando de trabajo… ¿cómo es trabajar con tu marido?
–Trabajamos hace muchos años juntos. Nos llevamos muy bien como matrimonio y en lo laboral también. Obvio que tenemos nuestras discusiones y puntos de vistas diferentes, pero nos enriquecemos. Durante el día no hablo mucho de trabajo con él porque sé que está con muchas cosas, pero cuando llega a casa le digo “¡Ahora te tengo para mí!”. ¡Y él no quiere saber más nada! (risas).

CUESTIÓN DE GÉNERO
Modelo, conductora, jurado… todo lo combina a la perfección con su rol más importante: ser mamá. Y desde hace ya un año, como ella misma dice, es madre de tres: su hermano Iván de 20 años está viviendo en su casa. “Se dio un poco porque mi mamá tuvo un ACV y se fue a vivir a las afueras de la ciudad. Y mi hermano estaba estudiando, por lo tanto no podía vivir tan lejos, en el medio del campo. Por suerte es súper responsable. Estudia periodismo deportivo, trabaja…  Además, cuando puede, me da una mano con los nenes. Ellos lo aman. Se adaptaron bien al cambio. Fue todo como muy natural”.

–¡Otro varón en casa! ¿Te gustaría tener una nena?
–Antes no, pero ahora me está picando un poquito la idea de tener una nena. Ser compañeras… compartir cosas que con el varón es diferente. Hay cosas que son muy propias de la mujer.

–¿Están buscando entonces?
–No, la verdad que no. Con dos está bien. Los amamos con todo nuestro corazón, pero es mucho trabajo.

–Cuidarse el cuerpo también es un trabajo. Antes dijiste que por eso aún “te daba” para seguir haciendo cosas de moda. ¿Cuál es el secreto?
–El más importante, es que no hay recetas mágicas. Puede haber algo de genética, pero después hay cuidado de uno. Siempre me cuidé y fui muy responsable con eso. Muy comprometida con mi carrera. Y lo adquirí como forma de vida. Porque me gusta verme bien, me gusta comer saludable, me gusta hacer actividad física… Los disfruto. Ahora por ejemplo estoy como muy copada con el running.

–Cuando decís que comés saludable, ¿a qué te referís exactamente?
–A productos que no estén muy procesados. Como frutas, verduras, tomo 2 litros de agua por día…

–¿Seguís teniendo tu huerta?
–Huerta menos, porque en verano estoy poco. Cada tanto tiro un par de semillas y sale alguna rúcula, por ejemplo. Sí tengo mi huerta de aromáticas que son nobles, no necesitan tanto cuidado. La idea es tomar conciencia de los alimentos que meto en mi cuerpo.

–¿Con tus hijos cómo manejás este tema?
–¡Con mis hijos soy una hincha! Por ahí lo que yo como quiero que lo coman ellos, porque sé que es bueno y es mejor para su salud. Si bien comen de todo, trato de que no coman tanto snacks y más frutos secos o frutas. Y siempre agua. Trato de fomentarles la actividad física, el aire libre. También creo que el ejemplo ayuda. Lo van mamando.

SEXY MOM
¿Cómo hace para mantenerse tan divina y estar en todo? Acá, sus tips:

Alimentación. Come muy saludable. Prácticamente ha eliminado las grasas y las frituras. “Hoy por hoy hay muchas recetas súper ricas y sanas”, señala.

Actividad física. Hace running.

Rostro. Va a la dermatóloga y se limpia la cara a la mañana y a la noche. Jamás se acuesta sin sacarse el maquillaje. Va a la cosmetóloga una vez al mes, quien le hace limpieza e hidratación. “Nunca me hice nada abrasivo”, confiesa.

Pelo. Se corta las puntas con regularidad para mantenerlo sano. “Todo esto yo lo hago durante todo el año. No ahora porque viene el verano. Me voy de viaje y lo que más me pesa es el bolso de las cremas. Es otra de las cosas que disfruto: el cuidado. Me gustaría envejecer con dignidad”.

Texto: Paula Matheu.
Fotos: Carlos Alfano.
Agradecemos a Süss Cupcake Cafe por su colaboración en esta nota.